Por que son buenas las amígdalas para el cuerpo

Parece ser que la manera más sencilla para protegerse uno mismo del desarrollo potencial de cálculos amigdalinos es eliminar completamente las amígdalas.

Aunque hubo una época en la que era una práctica común el eliminar las amígdalas si de manera rutinaria permanecían irritadas por cualquier razón, actualmente muchos médicos están reconsiderando ese enfoque. Eso es debido a que las amígdalas son realmente buenas por algunas buenas cosas.

Una de las maneras más sencillas de comprender la función de las amígdalas es imaginarlas como los porteros de las cavidades internas de su cuerpo. Su función es protegernos contra algunas de
las diversas formas de invasión que pueden tener lugar a través de la cavidad oral.

Debido a que las amígdalas a menudo pueden trabajar en conjunto con el adenoides y otro tejido linfático para retrasar y eventualmente desarmar varios tipos de bacterias, nuestros pulmones e intestinos terminan lidiando con menos problemas. Al mismo tiempo, el primer ataque que reciben las amígdalas por parte de los componentes que entran, le da tiempo a nuestro sistema inmune para evaluar la situación y prepararse para la batalla.

Generalmente, la función de las amígdalas es más pronunciada en los niños. A medida que maduramos en adultos y cuando nuestro sistema inmune ya desarrolló protecciones para un mundo lleno de bacterias que están acechando para atacarnos, la función de las amígdalas se vuelve menos importante.

Sin embargo, mientras tengamos un par saludable de amígdalas, ellas continuarán protegiéndonos en un cierto grado y en su momento nos ayudarán a disfrutar una calidad más alta de salud.

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