Hemos escuchado de personas que buscan refugio en el alcohol para curar su desesperación desde tiempos inmemoriales. Beber nos influye en muchos aspectos, uno de ellos es las ganas de llorar inconteniblemente en estado de ebriedad. Este reportaje le dice por qué nos emocionamos cuando bebemos.
"Siempre lo hago sobrio lo que dijiste que harías borracho. Eso te enseñará a mantener la boca cerrada." - Ernest Hemingway
Nadie sabe por qué una inyección de panacea, después de llegar a su estómago, le da una gran dicha. Pero no es la felicidad para todos. Beber evoca emociones diferentes en diferentes individuos. Algunas personas se sienten eufóricos, algunos llegan a ser infeliz o emocional, algunos se convierten en un modo impulsivo, mientras que para algunos, se convierte en un momento de auto-análisis astuto. La mayoría de nosotros podría haber conseguido emocionalmente emborrachado al menos una vez. Entonces, ¿qué pasa con la palabra "emocional"? ¿Por qué estamos asociando con la bebida? La respuesta es simple: el alcohol afecta a nuestra actividad del cerebro y altera el pensamiento racional. Cuando estamos bajo el dominio del alcohol, nuestras emociones, que nos mantenemos estrictamente vigilados en la sobriedad se sueltan. El Alcohol nos aleja de la realidad, al menos temporalmente. Si de repente se convierte emocional después de beber, significa que usted ha estado guardando un montón de sentimientos que ahora han encontrado una salida. Pero conseguir emocional no significa necesariamente estar triste, deprimido o nostálgico. Puede significar sentirse feliz y contento, demasiado, cualquiera que sea la reacción, el alcohol lo amplifica. Es la valentía rellenar una botella. Así, la próxima vez que usted está a punto de perder su perspectiva, ¿sabes quién es el culpable?
La anatomía de Beber y Obtención Emocional
Disfrutar la bebida con amigos y yendo un poco por la borda es un escenario común hoy en día. Entonces, ¿qué sucede cuando ese primer sorbo alcanza el estómago? Vamos a descifrar por usted.
La absorción en el torrente sanguíneo
de alcohol comienza a ser absorbido por el torrente sanguíneo a través de la mucosa del estómago. Cuando usted está bebiendo con el estómago vacío, la velocidad de absorción es mayor que con los alimentos. A medida que continúa bebiendo, el alcohol alcanza el tracto gastrointestinal y continúa siendo absorbido.
Circulación
Este alcohol se disuelve en el componente de agua de la sangre y comienza a circular en nuestro cuerpo a través de la sangre. Se llega a diversos órganos, antes de ser desintoxicado y eliminado por el hígado en forma de dióxido de carbono y agua.
Deprime el SNC
El órgano que consigue masivamente golpeado por el alcohol circulante es el cerebro. Actúa como un depresor sobre el cerebro. En términos simples, se puede decir que se ralentiza el sistema nervioso central (cerebro y médula espinal), y por lo tanto, experimentamos la pérdida de habilidades motoras, retraso en el tiempo de reacción, la reducción de la inteligencia y la capacidad de razonamiento.
Llega a la corteza cerebral
El alcohol circula alcanza la barrera sangre-cerebro y cruza. El alcohol es la única sustancia que puede entrar directamente en el cerebro, mientras que circula en el cuerpo. Finalmente, se instala en la capa más externa de nuestro cerebro llamada la corteza cerebral. Esta capa delgada (también llamada materia gris) se compone de células que cubren el cerebro y el cerebelo.
Pérdida del equilibrio
Podemos decir que esta materia gris es la que importa más. Cuenta con centros que procesan la información sensorial y el control de la enfermedad sobre nuestros pensamientos y muchos de nuestros movimientos musculares voluntarios. Este procesamiento y de control se realiza por los neurotransmisores que transmiten señales entre las sinapsis. Cuando el alcohol interrumpe este flujo normal de las señales eléctricas a través de neurotransmisores, entre las sinapsis, empezamos a perder el equilibrio.
Otros desequilibrios
Lo primero que sale es el proceso de registro de las inhibiciones. Esta es la razón principal por la cual nuestras emociones embotelladas salen tan fácilmente y se emociona. ¿Eso responde la pregunta? La segunda cosa a volar fuera de la ventana es la coordinación motora. Perdemos el control de la palabra y ser más locuaz. Nuestro juicio del espacio y el sentido de la orientación se aplica a un cara o cruz. Nuestra memoria también se ve obstaculizada, y en tal situación, nos volvemos olvidadizos. Esta es la razón de las personas que pierden sus llaves, carteras o teléfonos celulares. Todos estos efectos del alcohol son directamente proporcionales al nivel de alcohol en su sistema. ¿Cuánto tiempo dura la estancia de alcohol en su cuerpo?, depende de la eficiencia de su hígado para metabolizar.
Los sentimientos se amplifican
Puesto que todas las respuestas son arrojados a un flujo, terminamos estropear las cosas, como la incomprensión o exagerar nuestra propia, así como los sentimientos de otros. Esto explica la razón detrás de peleas de bar y por la rotura de barras. Más a menudo que no, la bebida afecta nuestra capacidad de retención de la memoria, y terminamos por olvidar los incidentes que sucedieron cuando estábamos borrachos.
Aparte de esto, los otros efectos secundarios del alcohol incluyen impedimentos de audición y visión, trastornos del habla, el pensamiento confuso, y la memoria nublado. Finalmente, puedo decir que el alcohol no hace más que representar una versión melodramática de nuestra personalidad sobria. Así que si usted es feliz, entonces te volverás ridículamente tonto, y si usted está desanimado, para empezar, es mejor atenerse a Red Bull!
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